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El mánager deportivo es uno de los pilares de cualquier entidad, equipo o club deportivo. Sus habilidades para la negociación y su dominio del derecho deportivo le permiten defender los intereses de sus representados, además de promover unas buenas prácticas deportivas.
En este artículo analizaremos la figura del mánager deportivo: descubriremos cuáles son sus funciones, qué requisitos debes cumplir para ejercer esta profesión y cuáles son los beneficios de especializarse en esta rama. Además, nos centraremos en una de las especializaciones más comunes de esta profesión, analizando cómo ser representante de futbolistas.
¿Qué es y qué hace un mánager deportivo?
A menudo denominado representante deportivo o agente deportivo, el mánager deportivo se corresponde con un perfil muy amplio que va más allá del objetivo de representar o defender, como se indica a menudo en la teoría. En la práctica, se encarga de una gestión mucho más amplia y abstracta de lo que parece a simple vista. Así, ejerce como intermediario, asesor, captador, reclutador, e incluso promotor, en cualquier disciplina deportiva.
El manager gestiona la adquisición de deportistas, pero también se encarga de la supervisión de los contratos, la comunicación con directores técnicos y entrenadores o la relación con los medios y las principales instituciones deportivas oficiales.
En conclusión, podemos resumir las principales funciones del mánager deportivo de la siguiente forma:
- Negociar contratos y adquisiciones
- Gestionar la actividad profesional de entidades, clubes o deportistas
- Conocer y aplicar el derecho deportivo en el trabajo diario
- Ofrecer asesoramiento fiscal
- Establecer y mantener relaciones con medios de comunicación
- Gestionar colaboraciones con empresas
- Ejercer como mediador entre instituciones oficiales u organizaciones deportivas
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Representante de futbolistas, la salida profesional del management más popular
Existen tantos tipos de mánager como disciplinas deportivas, pero es innegable que uno de los más conocidos es el especializado en el ámbito futbolístico, por la popularidad y cobertura mediática que rodea a este deporte. El representante de futbolistas es una figura habitual en los medios de comunicación, ya que es el encargado de representar a personalidades tan famosas como David Beckham o Messi y gestionar contratos millonarios con los diferentes equipos disponibles: un fenómeno que genera una gran expectación entre el público aficionado.
Por lo tanto, encargarse de este tipo de funciones no es tarea sencilla, y se requiere de una gran formación para hacerlo correctamente. Una de las claves que definen cómo ser representante de futbolistas consiste en no solo saber captar a los mejores jugadores, sino también en ayudarles a encontrar el equipo adecuado para ellos. Su objetivo último debe ser siempre el bienestar personal y profesional del representado.
Algunos de los mánagers deportivos especializados en fútbol que se rigen por esta máxima y, en consecuencia, disfrutan de mayor éxito, son Casey Wasserman, fundador de la agencia Wasserman de gestión de carreras deportivas, Jonathan Barnett, quien gestionó en su día el multimillonario acuerdo de Gareth Bale con el Real Madrid, y Alessandro Lucci, propietario de la prestigiosa World Soccer Agency.
Requisitos para trabajar como mánager deportivo
Como hemos podido comprobar, el mánager deportivo se encarga de tareas variadas y hace frente en su trabajo diario a cuestiones muy delicadas. Por ello, si deseas desarrollarte en esta área, debes contar con una serie de requisitos tanto personales como profesionales.
Estos son los principales requisitos para trabajar como mánager deportivo -y que pueden aplicarse también a las cuestiones que debes tener en cuenta sobre cómo ser representante de futbolistas-:
Formación académica
Con el objetivo de alcanzar los conocimientos y competencias técnicas necesarias para ejercer como mánager deportivo, es imprescindible que te hagas con una formación académica completa y actual. Deberás adquirir un conocimiento extenso del mercado y dominar los aspectos legales que rodean la práctica deportiva. Las mejores opciones para ello son:
- Un gran universitario, para asentar una base sólida de conocimiento en áreas como el deporte, el derecho, el marketing, los recursos humanos, la psicología o la gestión empresarial.
- Una formación de postgrado o máster centrada en gestión deportiva o sports management, como la que te ofrecemos en Unisport.
- Una formación o curso de especialización, con un enfoque más técnico y de extensión más breve.
También es recomendable especializarse en una disciplina concreta, ya que el sector es muy amplio y resulta prácticamente imposible aprenderlo todo sobre todos los deportes existentes. Apostar por una disciplina deportiva específica te ayudará a rendir mejor y focalizar tus objetivos.
Experiencia laboral
Cuando hablamos de experiencia laboral nos referimos, por un lado, a la experiencia que adquieras trabajando desde el momento en que finalices tu formación –empezando por las prácticas profesionales- y, por otro, a todo lo que aprendas al estar en contacto con profesionales referentes del sector.
Si deseas convertirte en un buen mánager, te recomendamos rodearte de los mejores y prestar atención a su forma de trabajar. Seguir de cerca sus pasos te ayudará a aprender de sus éxitos, pero también de sus errores.
Formación complementaria
Dominar el entorno digital y ser capaz de gestionar cuentas en diferentes redes sociales, sacando el máximo rendimiento a cada una de ellas, pueden ser competencias complementarias a la formación académica que te ayudarán a impulsar tu carrera profesional, dotándote de un perfil polivalente.
También resulta de utilidad el dominio de otros idiomas –especialmente el inglés- y la capacidad para desenvolverte con éxito en entornos culturales, sociales y económicos diferentes, ya que el deporte es un sector que tiende a la globalización. Es probable que en tu trabajo diario como mánager deportivo debas desplazarte a otros países para gestionar contratos y relaciones beneficiosas para tus representados.
Competencias blandas y habilidades
Si deseas trabajar como mánager deportivo, además de formación y experiencia, es importante que cuentes con algunas competencias imprescindibles. Aunque algunas son parte inherente de algunos profesionales, también pueden desarrollarse con tiempo y constancia. Algunas de las más importantes son:
- Comunicación efectiva
- Habilidades de negociación
- Pensamiento analítico
- Mediación ante situaciones de conflicto
- Trabajo en equipo
- Gestión del estrés
- Organización
- Empatía y paciencia
- Motivación
3 razones para convertirte en mánager deportivo
Los motivos para ejercer como mánager deportivo suelen encontrar su origen en una fuerte vocación e interés por el ámbito del deporte, pero sus beneficios son muy amplios.
A continuación, destacamos las razones más importantes por las que inclinarte hacia esta área de especialización son las siguientes:
Disfrutarás de unas condiciones laborales excelentes
Cuando hablamos de condiciones laborales, uno de los primeros aspectos que nos viene a la mente es el salario. En este caso, te adelantamos que serán cantidades muy atractivas y que, por norma general, irán en aumento con el paso del tiempo y, sobre todo, según se incremente tu prestigio, popularidad y renombre en el sector.
También influirá en el sueldo a percibir la categoría del club o deportista representado. Cuanto más alta sea la misma, más alta será la comisión o el salario que recibas. Por ejemplo, tu sueldo será mucho más alto si trabajas para un equipo de fútbol de primera división que representando a un deportista juvenil de un deporte minoritario.
En el ámbito del fútbol, los mánagers deportivos tienen un salario regulado por la FIFA. Por ello, perciben un 3% del sueldo del representado o club.
Trabajarás en contacto diario con profesionales del deporte
Si desde niño/a sueñas con descubrir todos los entresijos del ámbito deportivo, trabajando como mánager estarás mucho más cerca de conseguirlo. Aunque en tu día a día trabajarás fundamentalmente con los profesionales del equipo o entidad que representes, ten en cuenta que la profesión requiere de habilidades sociales básicas y un talento natural para el networking.
Esto quiere decir que, para realizar tus funciones con éxito, deberás ir más allá de tu representado y mantenerte en contacto frecuente con otros profesionales del ámbito deportivo, en cualquiera de sus áreas: entrenadores, coaches, psicólogos deportivos, CEO, directores deportivos, periodistas, influencers… y, por supuesto, ¡deportistas profesionales!
Defenderás los valores del deporte
Aunque pueda pasar desapercibido ante otras ventajas como el salario o la popularidad, este es uno de los principales beneficios de la profesión. El sector del deporte debe promover valores como la honestidad, la transparencia, el juego limpio, el compañerismo y el buen hacer.
Esto debe reflejarse no solo en la pista o el campo durante cualquier competición o partido, sino también en la forma en que se gestionan los contratos, se organizan eventos o se promueve la práctica deportiva. El mánager debe cumplir también con este compromiso. Al fin y al cabo, el fin último del mánager deportivo es defender los intereses del deportista, club o entidad representados, asegurando que no se produzcan abusos, irregularidades o conflictos de interés.
Como mánager deportivo te asegurarás de que, tanto las adquisiciones como las negociaciones de contrato entre clubes, deportistas, empresas patrocinadoras o medios de comunicación se produzcan de forma justa y transparente.
Desarrolla tu profesión en el ámbito deportivo con Unisport
Trabajar como mánager deportivo es una opción muy atractiva por sus numerosos beneficios, tanto a nivel personal como profesional. Sin embargo, para desarrollarte en esta área y trabajar, por ejemplo, como representante de futbolistas, necesitarás contar con una formación especializada, rigurosa y con garantías de calidad.
Nuestro Máster en Gestión Deportiva es una formación online flexible e innovadora en la que aprenderás a realizar la gestión integral de una entidad deportiva, así como a organizar y representar a las personas o equipos involucrados en cualquier actividad deportiva.
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